Nunca había oído hablar de este agua hasta esta semana y me
ha llamado muchísimo la atención.
Magma (de Cabreiroá) es un agua que nunca ha visto la luz. Se presenta en
un envase negro totalmente opaco y es obtenida del interior de la Tierra, allí
donde nunca da la luz.
Explican que cuando el planeta se comenzó a formar, la corteza se enfrió y
capturó dentro magma incandescente. La combustión de este magma produce un gas
que se mezcla con el agua y le da un cuerpo especial.
No es agua con gas al uso, tampoco es agua sin gas: tiene unas finísimas burbujas mezcla de gas carbónico natural y bicarbonato que apenas se notan en la boca, pero que aseguran es un buen arma para incrementar el sentido del gusto puesto que estas burbujas estimulan las papilas gustativas.
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