Los Do It Youself (DIY) están a la orden del día, con ellos
podemos obtener objetos hechos por nosotros mismos, originales, únicos… ¡y
además nos divertimos haciéndolos!
Hoy os traigo algo que he conocido hace poquito y que me ha
encantado: La arcilla de Jumping Clay. Las cosas que se hacen con este material
se podrían categorizar como DIY infantiles, pero realmente es divertido para
cualquier edad, ¡a mí me ha enganchado!
Os pego un trocito de cómo explican Jumping Clay en su web,
no podría explicarlo mejor:
Jumping Clay es un novedoso material artístico con el que
pueden crearse un sinfín de experiencias en 2 y 3D creativas y excitantes. Una
arcilla de colores fácil de manipular que estimula los cinco sentidos con su
aroma y tacto suave. Una vez seco el producto no pesa, tiene una textura
especial y bota haciendo más divertidos los juguetes. No mancha ni necesita la
supervisión de un adulto para su utilización segura. Es ideal para personas de
cualquier edad.
La arcilla la podemos encontrar en sus tiendas (tienen por
toda España) donde también imparten cursos y talleres.
La venden en sobres de diferentes tamaños y colores. Hay un
montón de colores distintos pero realmente podríamos comprar solo los básicos y
crear cualquier color haciendo distintas mezclas guiándonos por los códigos de
colores que detallan en sus guías (un pequeño ejemplo aquí). También venden
diferentes utensilios y moldes para que darle forma a nuestras creaciones sea
más sencillo. Además podemos utilizar distintos elementos como imanes, cuerdas
para llavero, muelles, imperdibles... que al integrarlos con la arcilla nos
permitirán obtener divertidos objetos.
Os dejo muestro un paso a paso del osito que hicimos el fin
de semana pasado con algunos de los materiales que trae el maletín que os acabo
de enseñar (da para hacer muchíiiiiiisimas cosas, lo compré en la tienda de Oviedo), aquí el
ejemplo del osito:
Lo primero es obtener los colores que vayamos a utilizar.
En este caso mezclando 9 partes de blanco con 1 parte de negro obtenemos este gris:
En este caso mezclando 9 partes de blanco con 1 parte de negro obtenemos este gris:
Distribuimos la arcilla en las partes que vayamos a necesitar.
Le damos forma a la cabeza, usamos dos bolitas negras para los ojos y arcilla blanca para el morro y el interior de las orejas.
Ahora que ya tenemos la cabeza le empezamos a dar forma al cuerpo y a las patas.
Para el cuerpo hacemos un cilindro y para las patas 4 piezas con forma de gota que terminarán con una bolita blanca aplastada.
Ya solo nos queda hacer una nariz azulita (mezclando azul oscuro y blanco) y el corazón.
Para que se quede compacto y no se separe ninguna parte, lo dejamos secar unas horas.
¡¡¡Y listo!!!
También hicimos esta furgoneta tipo Westfalia:
Para ser las primeras figuritas creo que no han quedado nada
mal :).
Siguiendo el paso a paso es bastante fácil de utilizar por
niños. Además no necesita supervisión porque no es tóxico, no mancha
absolutamente nada y se seca al aire pasadas unas horas (no es necesario
horno)... ¡y huele genial porque lleva esencia de jazmín!
¡¡Desde luego ha sido todo un descubrimiento!!!